La esperanza y la realidad fronteriza de Baja California

El ministro de Relaciones Luis G. Cuevas giró una serie de recomendaciones para garantizar la presencia mexicana en la península, para el era importante fortalecer el comercio entre Baja California y Sonora para que asi la presencia del interior del país se mantuviera constante, lo que esperaba que la región del Rio Colorado se poblace para alejar toda amenaza de aislar la península y evitar que los estadounidenses tuviesen una entrada al Golfo. También sugirió que Baja California tendría que tener su propio obispo que pudiese encabezar la evangelización de la región para poder pacificar a los indígenas, esto como solución al problema que trajo la secularización de las misiones de 1834 que dejo una alta inestabilidad en la región. En lo económico encomienda al coronel que fomentara el cultivo de trigo, olvio y la vid, asi como impulsar la pesca de perlas y el respaldo gubernamental para el impulso de la caceria de ballenas.

A pesar de que las ideas planteadas por el ministro Cuevas pudiesen sonar coherentes, no contaba con las condiciones penosas en que quedo el país y que la quiebra económica las dejara en la condición de buenos deseos. La llegada del coronel Espinosa junto con sus subordinados  como el capitán Manuel Castro como comandante militar y el sargento Jose Antonio Chavez como segundo encontraron la península sumamente afectada por las consecuencias de la guerra, estableciendo su capital en Rosario, que al poco tiempo la cambian por Santo Tomas que ofrecia mejores condiciones agrícolas. A pesar de que al poco tiempo la colonia empezó a ser exitosa con sus 200 miembros, pronto el capitán Castro y el general Chavez se convertirán en caciques que se aprovecharon del progreso ante la ausencia de Espinosa quien se encontraba en La Paz. Esta situación fue reportada por el héroe de guerra Jose Matias Moreno quien le envía una carta al coronel para notificarle los desmanes que provocaban sus subordinados.

Junto a esta carta, se hicieron llegar cientos de cartas que notificaron los problemas que enfrentaban los colonos, lo que hizo que Rafael Espinosa mandara una expedición por parte de la Guardia de Todos Santos y San Jose para imponer el orden, pero resulto en un fracaso que provoco que la misma colonia de Santo Tomas se desintregrara. Para 1853, el coronel Espinosa es reemplazado por el coronel Rebolledo llegando solo a cumplir con la misión del establecimiento de la colonia de Santo Tomas, la mala selección de sus encargados hizo que el proyecto cayera en el fracaso, quedando el con poca autoridad para poder seguir al mando.

La defensa del territorio también quedo dentro de sus pendientes al no lograr impedir la infiltración de las invasiones filibusteras siendo la mas importante la de William Walker quien logro establecerse en Ensenada ante la falta de tropas que pudiese defenderla. Falló en mantener poblada la región que dejo muchos territorios sin poblar, que sumado a la falta de supervisión por parte de Espinosa hizo que la frontera se mantuviese deshabitada y la dejo a merced de sus subordinados que hicieron ellas lo que se les ocurrio.

Pero esto no fue culpa solamente de Espinosa y sus hombres, también lo tiene el desinteres que mantuvo el gobierno central de mantener sus fronteras protegidas, ya que el modelo de las colonias militares triunfó en el interior del paisen estados como San Luis Potosi, Queretaro, Mexico e incluso el Itsmo de Tehuantepec lo que gasto en buena parte los recursos destinados a la defensa. Esto provoco que el 25 de abril de 1853, el presidente Antonio Lopez de Santa Anna derogara las colonias militares para dejar a su defensa en mano de compañías presidiales, lo que provoco que la región fuera acosada por indígenas y filibusteros que hicieron que Baja California se mantuviese en el subdesarrollo durante buena parte del siglo XIX.

Gracias por su atención y los espero en la siguiente lectura

Federico Flores Pérez

Bibliografía: Ángela Moyano. Instrucciones para el cuidado de la frontera de Baja California en 1848, revista Secuencia no.5, Instituto Mora

Imagen: Anónimo,  El rio Colorado entre Sonora y la Baja California. Fuerte mexicano. Frontera entre México y USA. Siglo XIX

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